miércoles, 3 de diciembre de 2008

Qué gente, por Dios...

Ayer me llamó al celular un tipo que ofertó por un mantel de Avon que yo tenía publicado en Mercado Libre.

¿Y qué pasó? Cuando le expliqué cómo era el sistema, que yo como revendedora no manejaba stock sino que lo conseguía por encargo, me salió con que no, que lo necesitaba para ahora mismo, que si yo publico un producto es porque lo tengo, que estoy lucrando con su plata y qué sé yo qué. Encima reaccionó como si no supiera que soy revendedora de Avon cuando en el aviso lo pongo bien clarito.

Por favor, qué gente de mierda esta. Ok, ta bien que "el cliente siempre tiene la razón" pero hay que ser más comprensivo, carajo! Yo no puedo darme el lujo de hacer una inversión en stock de productos porque me quedo en pelotas, y si después no los vendo y me quedan de clavo, ¿qué hago? Si pudiera hacer una inversión no me meto a revendedora, pongo un local y listo. Pero no, una inversión representa un gasto que no puedo ni quiero hacer, y los potenciales clientes deberían entender esto, que una revendedora es revendedora porque quiere ganar dinero pero no puede (o no quiere) invertir. ¿Cuál es el problema? Además, por algo tengo 128 puntos de reputación en el sitio.

La verdad, entre este tipo, la mina esa que me ofertaba en todos los artículos y me chantaba calificaciones negativas por pura venganza de que la califiqué negativo con justa razón (la suspendieron del sitio y se registró de nuevo para seguir jodiendo, la volvieron a suspender y la amenacé con meterle un agujero legal si seguía rompiendo las bolas y se quedó en el molde) y una que me puteó por teléfono cuando le quise explicar el sistema, la verdad es que ya me estoy curando de espanto...

2 comentarios:

synkro dijo...

La proxima aclarale para que no salgan giles como ese "NO DISPONGO DE STOCK, LOS PRODUCTOS SE CONSIGUEN POR ENCARGO" y en todo caso especificas el tiempo de demora. Siempre hay gente boluda que no presta atención a las especificaciones del sistema.
128 puntos es muuuucho.

Palomero dijo...

Menos mal que ahora sé esto, porque yo apenas te mandé un correo quejándome por la demora, y luego compré y todo salió al pelo. Fui tolerante en relación al cliente medio. Brindo por mí.