sábado, 7 de junio de 2008

Y aún sigo aquí...

Anoche me dormí esperando no amanecer con vida.

Desperté afiebrada, bañada en sudor y sin fuerzas para levantarme de la cama.

Aquí todo está tan negro, tan frío... es una agonía que parece no tener final.

Mientras que en el techo se aman los gatos, yo sigo aquí...

No hay comentarios: